jueves, 3 de octubre de 2013

Perfil del usuario de Mpeso o el típico nica

Ya tengo mi tarjeta y por eso regreso hoy para seguir contando historias, porque definitivamete en estos días he aprendido que los sistemas de pago cambian, pero la gente en el bus es la misma. Eso sí, ahora como usuarios de MPeso actuan de forma distinta. A continuación se los explico.



LOS APLICADITOS: Este usuario de MPeso es aquel que antes de subir al bus ya hizo su respectiva recarga, ya leyó las indicaciones de cómo utilizar su tarjeta y de hecho la anda siempre en la mano. Cuando la pasa por el validador y las luces verdes se encienden, a este usuario también se le dibuja una sonrisa en el rostro, mientras en su cabeza piensa con orgullo que ya vive en un país desarrollado. Luego de pagar camina en los pasillos con mucho orgullo como si acabara de dar un gran paso para Nicaragua y su sistema de transporte.

EL VIVO: Es aquel que tiene tarjeta y que no le ha hecho ni una sola recarga, pero se monta a la cara de barro al bus para ver si el conductor le perdona el pasaje. Pero lejos de poner cara de vergüenza, se hace el arrecho cuando el validador marca rojo y empieza a inventar la frase típica de “me robaron mi recarga”. Este usuario cumple su cometido cuando el busero “luego del show”, lo deja pasar o se encuentra a un buen samaritano que paga por él. Una sonrisa de triunfo se dibuja en su rostro pensando hacerlo nuevamente en el próximo bus.

EL MIEDOSO: Para este usuario de MPeso no hay peor pesadilla que el rótulo que dice “Solo tarjeta”. Desde que pone un pie en el bus comienza a sudar más que puta en misa. Ha leído todo lo que ha salido en los medios de comunicación y piensa que su tarjeta no le va a funcionar o que le robará su recarga. Las manos le tiemblan frente al aparato tecnológico que decidirá su ingreso al medio de transporte. Pasa la tarjeta por todos lados, menos por donde debe ser. La luz roja es el peor desenlace para este usuario.

RENEGADO: Finalmente está el usuario que tiene tarjeta pero se resiste a pagar con ella. No le hace recargas. La tiene guardada en el ropero. El amor a los dos pesos y las dos monedas amarillas es inexplicable. Espera los buses mixtos aunque tenga que ir colgado de la puerta. Él no usa la tarjeta, no por las críticas de los medios al sistema de pago, sino porque no quiere sumarse a  los “borregos” que ya usamos la tarjeta. Él simplemente va contra el sistema.

5 comentarios:

  1. Por lo menos en esta anécdota puedo sentir sinceridad, en comparación de otras publicaciones de otros "periodistas". El sistema trabaja bien, mi recarga me llegan bien, el validor registra mi pasaje, no se porque las demás personas publican siempre en negativo del sistema, o seré yo la única en 20 millones de personas que todo le sale bien respecto al sistema de mpeso?. Felicidades Mario, muy buena anécdota. Saludos

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    1. Te cuento que a mi tampoco me ha tocado mala experiencia con el sistema. Gracias por tu lectura.

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    2. Sabes, hoy cuando iba en el bus me acordé de tu anécdota, cuando escuché a un hombre decirle a su amigo " funcionó (tarjeta) porque le eché riales (recarga)". Entonces dije en mi mente, este era uno de los "vivos" que quería que la tarjeta funcionara sin haberla recargado.

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  2. Muy buena la característica de cada usuario, "los borregos" seguimos creciendo en el uso de las tarjetas.

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  3. A algunos nos toco ser "borregos" a la fuerza, yo no estoy encontra de la medida del uso de tarjetas, el problema aunque esta demas decirlo, es el proceso de como fueron imponiendo y dando las tarjetas, y el mal funcionamiento en las formas de recarga que ha provocado que los "vivos" no quieran pagar su pasaje y culpen al sistema por sus las fallas que este presenta.

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