Mario Guevara S.
Unas 800 mil personas se movilizan todos los días en bus por la ciudad de Managua. Si tomamos al pie de la letra aquello de que “cada cabeza es un mundo”, cada unidad de transporte se convierte en un universo lleno de historias a las que cada pasajero tiene acceso por tan solo 2.50 córdobas.
De pie o sentados, todos van sacando a empujones sus problemas, mientras el aire que se cuela por la ventana golpea el rostros con mirada perdida de los que van pensando en los hijos que quedaron en casa sin nada para comer, de los que van desenmarañando la discusión que tuvieron con su pareja la noche anterior, o los que van pensando en una estrategia de como esquivar al patrón abusador al llegar a la empresa.
“¡Avancen...avancen!” grita el conductor de la unidad, como si fuera tan fácil moverse entre el laberinto de gente y una atmósfera donde perfume y mal olor conviven para hacerle la vida de cuadritos a los que no desayunaron ni siquiera un trago de café.
Un frenazo termina de acomodar la masa humana que tira una mirada hacia afuera para ver a los que se sumarán a la aventura de viajar en ruta. Monedas en mano, a los próximos pasajeros se les borra de inmediato la imagen onírica de un bus vacío en hora pico.¡Sueñen!. Preparados sicológicamente para una tocadita, un apretón y hasta un robo, “los de abajo” ponen el pie en el primer escalón de aluminio y desde ahí no hay marcha atrás. Al otro extremo de largo vehículo otros se despiden de la “aventura” saliendo por la puerta de atrás, pensando en aquel viaje como algo que quedó en el pasado pero que volverá a ocurrir muy pronto.
“¡Avancen...avancen!”, se vuelve a escuchar en el interior del bus, frase que me recuerda que en materia de transporte público ha avanzado mucho en los últimos años. El transporte urbano de Nicaragua es, hoy por hoy, el más moderno de Centroamérica, y al mismo tiempo es el más económico. El pasaje cuesta el equivalente a $0.10 dólares. En San Salvador, por citar un ejemplo de la región, se paga el doble cuando se viaja en autobuses, un 150% más si lo hace en microbús. En Centroamérica
Apretadito, con calor y a veces hasta aguantando el mal carácter de los conductores, es difícil no reconocer que la introducción al sistema de transporte colectivo de la capital de más de 800 unidades de fabricación mexicana y rusa, así como el incremento desmesurado de la gasolina, ha motivado a mucha gente a dejar su carro guardado en casa y vivir una aventura por solo 2.50 córdobas.
Que hermoso.
ResponderEliminarGracias Bartolo
EliminarDe los mejores post que he leído sobre la crónica de viajar en bus. (Y).
EliminarPrimo, yo los finde me iré en bus.
ResponderEliminarA mi me gusta andar en bus, pero en hora pico en un poco más complicado, pero no dificil
EliminarExcelente Mario te felicito, una verdad que vivimos a diario los Nicaragüenses
ResponderEliminarExcelente Mario te felicito, una verdad que vivimos a diario los Nicaragüenses
ResponderEliminarGracias
EliminarMuy buena descripción del día a día de muchos nicaragüense! Felicidades
ResponderEliminarMuy buena descripción del día a día de muchos nicaragüense! Felicidades
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